Historia de MiLa.

Capítulo 3

“Confusiones al instante”

Mila:

  8 de la mañana, salió a bañarse entonces se tiro en la cama, en vuelta en sabanas  junto chispitas, contemplando la mañana que entraba desde   la ventana que estaba enfrente de su cama  y  preguntándose si en realidad podría existir alguien tan único como Leo, su amor por la literatura era fascinante  poder encontrar a alguien con quien disfrutar una plática hablando de aquellos libros que ambos nos encantaban, se que solo fueron unos minutos hablando con él, pero no puedo negar que hubo una chispa entre nosotros, me pregunto si tendrá novia o algo parecido, espero que no, pues me pidió mi teléfono ese día, la pregunta es cuando llamara, se eso me lo dijo el Lunes y hoy apenas es Martes, vamos MiLa se paciente ya llamara, mientras debo arreglarme que se me hace tarde para el trabajo, vamos chispitas te daré de comer rápido que aun me tengo que vestir para irme, solo espero no encontrarme al pesado de David, aun que debo de admitir que él tampoco está nada mal, ya Mila deja pensar en tonterías y apúrate que   se hace tarde- toma un vestido floreado junto con suéter azul y sale toda apurada pues entre tantos pensamientos se le hace tarde.

Apenas si llega lograr llegar a tiempo al trabajo, pero no contaba con encontrarse a su jefe  Roberto- otra vez tarde Mila.

-Perdón es que hacia un tráfico terrible, pero ya estoy aquí, cual es la tarea de hoy.

- Primero que nada Mila te quería felicitar por tus encantadoras fotos que me trajiste aquel día, quedaron fantásticas, fueron un existo en el artículo de  la revista.

- Mila toda feliz, algo sonrojada y con una cara de orgullo por sus fotos- ¿En verdad le gustaron? Vaya que alegría.

- Si son bastante buenas además el modelo que usaste  quedo perfecto pero en fin te quiero pedir  que hagas…-  entonces Mila se pierde en su cabeza  recordando que ese  modelo fue Nat, y se preguntaba ¿Cómo estará?, la ultima vez que lo vi fue el dia de las fotos, pues vaya que prefecta ocasión le llamare para avisar del éxito de las fotos y aprovechare para invitarlo a tomar algo y también…- ¡Mila! ¡Mila! Despierta

- Perdón Roberto que decías-Vaya niña eres muy buena fotógrafa pero muy distraída, te decía que necesito que tomes unas nuevas fotos pero ahora quiero que hablen acerca  de lo hermoso que puede ser esta cuidad de noche, tienes 2 semanas para entregármelas- Perfecto Roberto, no te defraudare.- Eso espero ahora anda empieza a con es proyecto.- Si eso hare.

Mila dirigiéndose a su escritorio, toma el teléfono y cuando menos se da cuenta le está marcando a Nat, se pone algo nerviosa pues al parecer no le contesta y al ver que el hombre no contesta, empieza bajar el teléfono lentamente, pensando que tal vez el estaba ocupado en el hospital, ya cuando esta apunto de colgar, escucha esa voz tan masculina diciendo- ¡Hola! ¡Hola!-  Mila con un tono muy feliz- Hola Nat, soy Mila ¿Cómo estás? ¿no te interrumpo?- Nat aun que hablara con seguridad estaba totalmente emocionado por a ver recibido esa llamada tan repentina de su querida Milagros.

-Vaya que milagro, muy bien gracias, y no, no te preocupes no me interrumpes, ¿Qué se ofrece?- Nada, llamaba para saludarte y decirte que  las fotos fueron todo un éxito galán-  vaya me alegro mucho Mila- Si, yo también pero quería ver si tenias tiempo para ir a celebrar y claro también para que te muestre que tal quedaron las fotos – Si me parece, mira ahora ando algo ocupado con el hospital, pero te parece que nos veamos a las 6 en el zócalo ¿Va?- Si, me parece perfecto, nos vemos al rato entonces- Si Mila nos vemos en un rato- Bye  guapetón- suelta una risa Nat, algo curiosa- Bye Mila.

 Mila apurada   tratando de terminar su trabajo para poder llegar a tiempo a casa y arreglarse un poco mas para ver a Nat,   ya a punto de salir, se vuelve a topar al odioso de David.

-Hola Mila, me entere de lo de tus fotos, muchas felicidades, me las mostraron y debo de admitir que están increíbles.- Gracias David- esperando que siendo cortante  se vaya y se de cuenta que en realidad no quiere hablar con el- huy Mila hoy si que estas seca y puedo saber a qué se debe- pues claro a tu arrogancia de galán  y que piensas que esos trucos funcionaran conmigo en su mente se dice- Perdón es que me siento algo mal y quiero ya llegar a mi casa- Esta bien, descansa mañana te veo Mila – se acerca y le da un beso en la mejilla un beso que extrañamente a Mila no le molesto al contrario lo sintió sincero y algo dulce, pero a pesar de eso ella siguió con su camino hacia el elevador para poder salir y llegar a su casa a lo que realmente  iba hacer.

Llegando abre la puerta se da cuenta que son las 4:30.-Vaya aun tengo algo de tiempo para arreglarme vamos, el vestido es bueno pero no me gusta tanto para salir con el, vaya ya se me pondré la falda liza azul y el suéter rosa con top abajo si así perfecto, se apura a vestirse, al fin sale y le dice chispitas- que te parce, voy bien ¿no crees?.- por lo que chispitas solo le responde tiernamente con una mira un alzando las orejas- ok, eso lo tomare como un si… vaya ya son 5:30, toma sus cosas para ya irse pero entonces recibe una llamada de un número desconocido, no sabe de quien se podría tratar pero aun así decide contestar.

-¿Hola?- Vaya hasta tu voz es hermosa por teléfono.-¿Quién habla, perdón?

-suelta un pequeña risa- Soy yo Leónidas, Leo ¿Cómo estas?- sorprendida  y  feliz porque había cumplido lo que había dicho de hablarle es mas en menos de las semana, vaya que si estaba emocionada, pero ella no quería que lo notara asi que trato de hablar muy natural, aun que era casi imposible con tanta emoción que tenia.- Vaya sorpresa que me has dado. Muy bien gracias.

-Me alegro, oye quería ver si tenías  algo que hacer esta noche por que unos amigos expondrán algunas  pinturas y quería ver si querías acompañarme- Pues aun mas emocionada y ella sabía que no podía rechazar  aquella  invitación espontanea, pues eso ella era lo que le gustaba la espontaneidad,- Vaya, si claro sería fantástico, pero dime ¿A qué hora?-Es a las  6:30, es más si quieres paso por ti,  para que no te pierdas- Si, me parece bien, te mando  un mensaje con la dirección – ok te veo en 15.

Mila cuelga el teléfono, bailando de la emoción, pesando que llevara la cámara para tomarle un sinfín de fotos… ¿fotos?… ¡Carajo! Nat, se me olvido por completo por tanta emoción que sentía, ¿Qué hago ahora?, le mandare un mensaje diciéndole que se me complicaron las cosas en el trabajo y me siento un poco mal y que si lo podríamos dejar otro día, espero que no se enoje.

Listo, ya lo mande- en eso suena  el timbre- vaya es el ahora tranquila Mila, no lo arruines- abre la puerta controlando su emoción.

Mientras tanto el pobre Nat esperándola en el zócalo ansiosamente  y pensando, vaya de seguro hoy se verá tan hermosa como siempre, esa mujer, siempre dejándome sin aliento, tienes algo que me encanta, tal vez su rareza sea su encanto natural, simplemente no  lo sé, vaya prefecto un mensaje de  ella de seguro se le hizo tarde como siempre o…- Empieza a leer el mensaje y bajando con eso un poco su ánimo- Vaya que mala suerte la mía. -Contestándole  al mensaje: si Mila no te preocupes , luego nos veremos, espero que todo esté bien, cuídate.- dándole a lo tecla enviar tristemente y dirigiéndose a coche con todo esa emoción hecha añicos  y convertida en tristeza, pero el tratando de ver le el lado positivo a las cosas- Mañana iré a  verla de sorpresa, igual y solo estaba cansada, lo único que espero es que no sea un mentira, porque en realidad quería verla, en Realidad me gusta.